conocimiento, fuentes
del EPIST.
Manera tradicional de presentar lo que con mayor actualidad se denomina
justificación de una creencia. En el supuesto de que el conocimiento consiste
normalmente en una creencia racional, esto es, en una creencia apoyada en
razones, «fuentes» del conocimiento se llaman los lugares, en el sentido
metodológico de la palabra, en donde hallamos estas razones o justificaciones de
la creencia. Podemos decir también que constituyen los criterios generales con
los que sabemos que algo es verdad. Las fuentes tradicionales del conocimiento
son:
a) la experiencia externa, o la percepción: rechazamos como falsa cualquier
teoría de la percepción que intente demostrar que no podemos fiarnos
sustancialmente de la experiencia. b) La memoria como forma de experiencia es
igualmente una fuente del conocer; se remite igual que la experiencia a la
percepción y confiere igualmente evidencia y razonabilidad a lo que sabemos. c)
La propia reflexión o autoconciencia, entendida como el conjunto de experiencias
externas e internas que resultan inmediatamente evidentes e inmunes a toda duda
razonable. d) La razón como agente de conocimiento indirecto, que otorga
evidencia mediata a lo que conoce de un modo discursivo (razonamientos) o por
análisis de los términos (cálculo y verdades analíticas; ver cita).
La autoridad, no es fuente de conocimiento, en sentido propio, y sólo puede
serlo en sentido amplio en contextos muy delimitados y específicos, aceptada con
espíritu crítico, esto es, con conocimiento de sus razones y con libertad para
oponerse a ellas, y usada como un apoyo exterior complementario. La intuición
(intelectual o sentimental), aunque aceptada en algunos momentos de la historia
de la filosofía (Scheler, Bergson) es, desde el punto de vista epistemológico,
poco fiable como fuente de conocimiento, por su naturaleza subjetiva; el
intuicionismo ético es discutible. La fe, religiosa o no, tampoco es fuente
epistemológica adecuada, pues no es directamente objeto de percepción o de
razón, ni por lo mismo de conocimiento (ver cita); sin pruebas, la fe es pura
creencia; con pruebas, es conocimiento racional, o creencia racional y deja de
ser fe Son fuentes legítimas de conocimiento, por tanto, la percepción, la
memoria, la autoconciencia, que producen evidencia inmediata, y la razón
dicursiva o analítica, que produce evidencia mediata.
Ver saber.
Diccionario de filosofía en CD-ROM. Copyright © 1996. Empresa Editorial Herder
S.A., Barcelona. Todos los derechos reservados. ISBN 84-254-1991-3. Autores:
Jordi Cortés Morató y Antoni Martínez Riu.