Prof. Dr. José Rodríguez de Rivera / Dpto. Ciencias Empresariales. Universidad de Alcalá
(griego: logikh tecnh = arte o técnica del pensar; ciencia del pensamiento)
En el lenguaje cotidiano se aplican los términos 'lógico' o 'lógica', en sentidos muy dispares, como cuando se habla de una 'lógica de las cosas' (para indicar que una situación lleva forzosamente a otra), o de la 'lógica vital'. También se emplea el término 'lógica' para caracterizar, por ejemplo: la "lógica del dinero", la "lógica del capital", la "lógica del poder", la "lógica del rearme" etc., indicando que en esos dominios existe algo así como un sistema (real o supuesto) de reglas o de "leyes" objetivas que son seguidas por las operaciones realizadas en tales dominios. En el fondo, muchas de esas formulaciones parece indican que se presupone una como necesidad de que desde ciertos estados de cosas se han de seguir determinadas consecuencias, y que esta necesidad es en cierto modo "racional" - de ahí la referencia al "logos". Es decir, el campo semántico del concepto une a la idea de conexión necesaria o determinante (entre unos y otros contenidos) la idea de que tal necesidad o determinación tiene una correspondencia en lo racional, es decir, en las leyes o estructuras de un pensamiento correcto (contrapuesto a la arbitrariedad o juego libre de ideas de una construcción poética, metafórica, onírica etc.).
El término, utilizado en su sentido más amplio en el contexto del estudio de las operaciones de construcción mental (teoría, metódica, investigación) o de sus productos (sistemas teóricos, etc.), designa el estudio y análisis de las operaciones cognitivas en que se relacionan contenidos mentales o se realizan inferencias (se sacan consecuencias desde otros contenidos) o se argumenta sobre objetos o estados de cosas en un ámbito de temas o problemas buscando en dicho análisis las condiciones o principios que determinan la verdad o corrección de tales inferencias. Y este estudio se caracteriza además por su orientación abstracta: por prescindir de los contenidos concretos, y por así decirlo, dejar a un lado todo lo singular y situacional, y quedarse sólo con la estructura ósea que de otra forma quedaría ocultada por la riqueza de referencias lingüísticas de cualquier argumento o formulación. Analizar lógicamente una argumentación o una construcción de ideas implica pues un trabajo similar al de un cirujano forense despojando al cadaver progresivamente de todo lo que constituía su concreción (y atractivo) carnal, para llegar a desvelar qué últimos factores han determinado se llegara a la configuración final analizada.
Por esta razón, el análisis lógico tiene tantos puntos de contacto con el análisis metodológico, es decir, con el análisis de los factores que condicionan o de los principios de validez de un método. Al fin y al cabo, una metodología no es simplemente una agrupación de métodos (eso es "metódica"), sino un análisis lógico de una familia de métodos.
Estas relaciones entre método y lógica justifican que el término 'lógica' pueda designar a veces la metódica seguida en la concatenación de deterinadas acciones (la lógica seguida en una transacción interempresarial) y, más frecuentemente, la metódica seguida en la actividad científica ("lógica de la investigación").
En contextos de reflexión sobre ciertos campos del saber o del estudio de lo humano se han desarrollado otros conceptos de lógica. Entre estas concepciones destacan:
La "lógica de los sentimientos" puede retrotraerse a las consideraciones de Pascal sobre las razones que tiene el corazón (logique du coeur) o la filosofía del sentimiento de Herder. También se habla de una lógica jurídica, o de una lógica hermenéutica (G. Misch la elaboró como fundamentación a las ciencias del espíritu según la interpretación de Dilthey), o de una lógica histórica (J.T. Mill), así como de una lógica jurídica (sobre todo, sistematizada por U. Klug, 1951).
En la moderna Teoría de
En el curso de su historia,
Ciertamente, el término 'dialéctica' es utilizado hoy en forma nada precisa, pero en el pasado fue construido en forma mucho más definida e inicialmente referida sobre todo a la situación comunicacional en que se desarrolla una reflexión crítica sobre la forma de llegar a conclusiones válidas.
En Platón no se habla de "lógica" sino de Dialéctica o, más precisamente, de conocimiento dialéctico: dialektikh episthmh/tecnh.
En el contexto de una reflexión sobre la forma de razonar (en comunicación
argumentativa), la dialéctica debía estudiar tanto el análisis
(descomposición, disección) de los conceptos como su síntesis (conexión,
relación entre) (Platón: Sofista 253 df), y ese
estudio debía servir a garantizar rigor en el conocimiento de lo que existe
verdaderamente, lo que en la concepción platónica suponía refeirse
a las "ideas" (Filebo 58a, Fedro
En su esfuerzo por diferenciación conceptual, Aristóteles restringe el
ámbito de trabajo de
Esta Dialéctica era diferenciada de
Restringiendo la exposición a la lógica occidental - orientada siempre a los
aspectos más abstractos o "formales" (diferente fue la evolución en
el caso de la lógica en el ámbito cultural de
En Platón y Aristóteles formaba parte de
Platón trató temas lógicos como
En la filosofía medieval, una parte de los problemas de la lógica fue tratada conjuntamente con la teoría del lenguaje bajo el título de "dialéctica"; mientras que se restringía el uso del término 'lógica' a los comentarios a Aristóteles. Los filósofos del Medioevo discutieron sobre si la ógica era un arte-técnica o una ciencia (ars aut scientia), o si era una disciplina teórica o práctica.
En otra línea de comprensión se encuentra "La logique
ou l'art de penser" elaborada en
Church y Gödel pusieron de manifiesto no sólo que el subsistema de saber que denominamos "Lógica" no era un sistema absolutamente inmune a contradicciones internas, sino que también tenía que renunciar a sus anteriores pretensiones de facilitar una última justificación de la validez de los conocimientos adquiridos por distintos tipos de operaciones de inferencia desde otros contenidos cuando dicha justificación se debía realizar como fundamentación formal (en el sentido expuesto arriba).
Sus "pruebas" (conseguidas con el artificio de aritmetizar un cuerpo de relaciones entre contenidos formalizados) fueron realizadas en el campo temático observado, es decir, sin tener aún en cuenta la diferencia observador/dominio_observado.
La prueba de la transcomputabilidad de sistemas complejos (de von Foerster), es decir, de que al realizar operaciones en máquinas no-triviales, es imposible todo "cálculo-formal" (cuantificacional o del tipo que sea) nos lleva a la conclusión de que hay que replantear la misión o tareas de la lógica en el contexto de la "observación" de la complejidad.
Esa nueva tarea de
Las operaciones lógicas transportan --> irritaciones desde el punto-observado en que se originan a otros subsistemas (observado-construidos) en que pueden ser objeto de observación-proceso. Metafóricamente, Luhmann (WISGe 442) formula esa tarea nueva tarea de la lógica como la de suministrar armazón óseo al entramado de nervios que de otro modo se derrumbaria (no en el observador). La lógica no sólo transporta dichas irritaciones sino también libera a otros centros de procesamiento de la carga de tener que ocuparse de tales problemas. Por ello, como decía Ashby, la lógica garantiza la "ultraestability" del sistema al impedir que sólo alguna parte quede afectada, no el conjunto, cuando se producen tales informaciones-sorpresa.